Por Milton von Hesse.
El reciente informe de la clasificadora de riesgos Standard and Poor’s rebajó la calificación crediticia del Perú de BBB a BBB-, reflejando preocupaciones sobre la estabilidad económica del país debido a la debilidad política del Gobierno. El Congreso ha impulsado leyes que erosionan la base económica, como autorizar un nuevo retiro de fondos de las AFP y proponer el retiro total de los fondos de la CTS, lo que pone en riesgo el sistema previsional y el seguro de desempleo. Además, se están aprobando gastos excesivos y decisiones de endeudamiento imprudentes que amenazan la salud financiera del país. Es crucial que el Ejecutivo y el Legislativo prioricen la sensatez económica para evitar el deterioro de la calificación de riesgo, lo que podría encarecer el financiamiento externo y perjudicar las inversiones y la generación de riqueza en el Perú.
Lee aquí su columna publicada en El Clarín (Cajamarca):