Por Janice Seinfeld
La mayoría de congresistas, salvo pocas excepciones, están permitiendo que criminales puedan postular a cargos públicos. Esto porque han modificado un proyecto de ley que originalmente prohibía esta práctica. Inicialmente se propuso vetar a quienes cometieron delitos graves como terrorismo y corrupción, pero la versión revisada deja abierta la posibilidad para tener condenados por violación sexual, colusión, peculado, corrupción de funcionarios, homicidio, trata de personas, secuestro, contra la seguridad nacional y traición a la patria y contra los poderes del Estado y el orden constitucional. Esta decisión podría llevar a que, en futuras elecciones, terminemos teniendo autoridades condenadas. Toca hacer un llamado urgente a la sociedad civil para oponerse y reflexionar sobre el impacto de estas acciones en el país.
Lee aquí su columna publicada en El Tiempo (Piura):