Nuestras fortalezas macroeconómicas nos han permitido tener uno de los planes más expansivos de la región para atender las contingencias que trajo la pandemia de la COVID-19. Sin embargo, consecuencia de esto, la situación fiscal y las finanzas públicas de nuestro país se han visto deterioradas significativamente. Lamentablemente, ya desde hace años, los ingresos fiscales en el Perú se han mantenido bajos, a pesar de los esfuerzos por incrementar la base de contribuyentes y luchar contra la evasión y elusión tributaria. Así, en el contexto actual no podemos perder de vista el manejo fiscal. Un manejo fiscal responsable permitirá costear la lucha contra la pandemia, la estrategia de reactivación, atender las brechas de servicios básicos, y financiar las reformas y políticas públicas que el Gobierno necesita emprender.
Desde #PropuestasDelBicentenario apostamos por recuperar el espacio fiscal, contar con ingresos permanentes y sostenidos, y hacer más eficiente el gasto público para cerrar las brechas sociales que nuestro país tiene y que se han visto agudizadas por la pandemia. El esfuerzo central está en aumentar la base de contribuyentes y buscar aquellos nichos donde el esfuerzo fiscal es bajo. El Gobierno debería enfocar todo su esfuerzo para lograr recaudar los recursos, pero sin que esto penalice la actividad productiva del país. Creemos posible que en el próximo quinquenio se puedan incrementar los ingresos tributarios en dos puntos del PBI y mantener la credibilidad en el manejo fiscal del país. Sin estabilidad macroeconómica, no hay desarrollo.
¿Cómo lograrlo? En el octavo y último episodio del Podcast #PropuestasdelBicentenario, una iniciativa en alianza con la Red de Estudios para el Desarrollo (Redes) y el Comité de Lectura, Luis Miguel Castilla, exministro de Economía y Finanzas, conversa con Oswaldo Molina y Paola del Carpio, de Redes, sobre las medidas planteadas en Propuestas del Bicentenario para mejorar las finanzas públicas y reforma tributaria de nuestro país.