Milton von Hesse
Director de Videnza Consultores
En las últimas semanas tanto Pedro Castillo como Keiko Fujimori han anunciado propuestas adicionales a las incluidas en sus planes de gobierno.
En términos económicos, las últimas propuestas económicas que Pedro Castillo ha realizado se mantienen en la línea y coherencia del ideario de Perú Libre. Él sigue considerando que la integración con el mundo es mala y se debe frenar la “competencia desleal” de importaciones. Esto ya se ha vivido en el pasado. Ya sabemos que cuando un país se cierra a la competencia internacional, lo que se vende internamente termina siendo caro y de mala calidad, porque al no tener competencia no se tiene incentivos para innovar y ser más eficiente..
Preocupa esta visión del candidato Castillo, sobre todo en lo que se refiere a la agricultura. El candidato no se da cuenta de que la canasta básica familiar, que tiene productos como el pan, pollo y leche, depende de insumos importados. Si el candidato llega al poder y corta las importaciones de alimentos, la canasta de consumo de los más pobres se va a encarecer y va a ser de peor calidad.
Respecto a la propuesta de la candidata Keiko Fujimori de otorgar transferencias directas a la población por el concepto de canon; tiene puntos positivos y negativos. Por el lado favorable, efectivamente una proporción del canon no se ha utilizado por lo que podría ser adecuado si un porcentaje limitado de los ingresos del canon llega directamente a la gente. Por el lado negativo, se quitaría dinero a los alcaldes para hacer proyectos de infraestructura que den servicios básicos, y también se puede ocasionar distorsiones que generen nuevos conflictos sociales o que incentiven a que la población que antes vivía en un distrito quiera partir masivamente a otro para recibir más dinero. Es una propuesta interesante y tendría que implementarse con el soporte técnico necesario.
Ambos candidatos incluyen algún tipo de subsidios para los afectados por desempleo ante la COVID-19. El daño de la pandemia sobre la economía de los hogares más pobres ha sido muy grande. Cualquiera de las dos opciones que llegue al poder, va a tener que ser expansiva con el gasto, porque la situación lo amerita. En ese sentido, el próximo quinquenio va a tener que haber una expansión del gasto público. El Gobierno deberá gastar más, pero hay que hacerlo bien. De manera focalizada y técnica. Ese gasto debe llegar a quienes más lo necesitan.
Sin embargo, así como será necesario expandir el gasto público; también es indispensable que el nuevo gobierno diseñe una estrategia que permita empezar a recuperar las cuentas fiscales, incrementado los ingresos permanentes y eficientando el gasto público.
Por otro lado, es igualmente importante para ambos candidatos contar con un equipo técnico solvente para manejar un gobierno en medio de una grave crisis sanitaria, económica y política. La estabilidad de esos equipos a lo largo del gobierno también lo es. En estos cinco años no solo hubo cuatro presidentes, sino también ocho ministros de Economía con todos los efectos negativos y colaterales que ha tenido eso.
Por último, con relación a la fragmentación que habrá en el Congreso, el gobierno que asuma deberá buscar los consensos necesarios y apelar a estos gabinetes de ancha base. Lo que hemos visto en estos cincos años es de terror. El nuevo Gobierno no va a poder llegar con una posición autoritaria ni pretender que su visión del mundo sea la que se va a implementar, porque en ese contexto llegaría esta lucha permanente entre “yo te vaco como presidente” o “te cierro como Congreso”. Eso es lo peor que le puede pasar al país.
Basada en entrevista a Milton von Hesse, publicada en El Comercio el martes 18 de mayo.